Ahora que tengo una flamante estación "grande", en una parte quería colocar algunos contenedores, puesto que además, en uno de los kit de construcción de algún edificio, incorporaba una grúa pórtico, que se asemeja bastante a las de las terminales de contenedores y también podía poner alguno en las instalaciones de la fábrica de cerveza, que justifica otra de las estaciones de mi maqueta. Además, son muy vistosos y creo que pueden quedar bién en los sitios que he comentado, aunque para eso tienen que estar acompañados, para darle realismo, de algún que otro camión porta-contenedores.
Después de mucho mirar por la Red, los precios de los contenedores en plástico son muy caros como para comprarlos alegremente y, la otra opción es fabricarlos uno mismo, en cartulina recortable.
Es verdad que existen bastantes páginas donde se pueden descargar imágenes de contenedores, aunque es mucho mas difícil encontrarlos para nuestra escala. Porque la idea de ir haciendo pruebas hasta conseguir la "foto" que coincida con nuestra escala, que en algún sitio he visto que se propone como solución antes de imprimirla, no me acaba de convencer.
Así que para conseguir tener una cantidad suficiente y de varios tipos, he recurrido a comprarlos ya troquelados, a una empresa de Reino Unido. Los últimos que he recibido han sido 9 unidades de DHL en la medida de 20 pies y en las dos versiones (nuevos y envejecidos), por un importe total de 2,42€. Es decir que, de media, cada uno cuesta poco mas de 26 cent. y la calidad de las imágenes son aceptables.
Como la parte más delicada del proceso es el doblado, para conseguir un doblez lo mas afinado posible, he recurrido a marcarlos previamente con la parte posterior del filo de un cuchillo de mesa, que permite que el doblez sea preciso y uniforme.
También, y para evitar (dado el tamaño tan pequeño para mis dedos) que el proceso de pegado sea mas fácil, me he fabricado un útil con una maderita del tamaño del interior del contenedor, con lo que consigo que las partes a pegar apoyen sobre sólido, en vez de hacerlo al aire.
En fin, una tarea más para los ratos en que se quiere cambiar de actividad.